Jucio verbal
El juicio verbal es un tipo de procedimiento judicial de carácter civil regulado por la Ley de Enjuiciamiento Civil (Ley 1/2000, de 7 de enero), ideado para resolver disputas de forma más rápida y sencilla que el juicio ordinario. Se aplica principalmente a casos cuya cuantía no supera los 15.000 euros o a materias que, por su naturaleza, requieren un tratamiento ágil, como los desahucios, precarios o reclamaciones por impago de rentas.
¿Cuándo se utiliza el juicio verbal en casos de vivienda?
El juicio verbal está pensado para situaciones que, aunque relevantes, no requieren una fase probatoria compleja. En el ámbito de la vivienda, es muy común en los siguientes supuestos:
- Desahucio por falta de pago o por expiración del contrato.
- Recuperación de inmuebles ocupados sin título (precario).
- Reclamaciones de rentas o de cantidades inferiores a 15.000 euros.
Este tipo de juicio suele tener una sola vista oral en la que se exponen los hechos, se aportan pruebas y se dictamina una sentencia. No obstante, en la práctica actual, el procedimiento ha acumulado trámites, requerimientos y plazos que ralentizan su tramitación, especialmente en los juzgados con alta carga de asuntos de arrendamientos urbanos.
Ejemplos prácticos de juicio verbal en alquileres
Vivienda habitual (reclamación por impago):
Una arrendadora interpone demanda contra un inquilino que lleva tres meses sin pagar la renta de una habitación en su piso compartido. La cuantía reclamada es de 1.200 euros. El procedimiento se tramita como juicio verbal. El juzgado una vez admitida a trámite la demanda da traslado a la demandada por plazo de 10 días para que pague, se oponga o entregue la posesión al demandante. En el caso de oposición el Juzgado convoca a las partes a una vista y, tras celebrarse la vista y escuchar las alegaciones de las partes y revisar los justificantes de impago, dicta sentencia.
Local comercial (desahucio por finalización del contrato):
Un comerciante alquila un local por un año, pero al terminar el plazo no entrega las llaves ni abandona el inmueble. El propietario presenta una demanda de desahucio por expiración del término, que se tramita mediante juicio verbal. Aunque en teoría es un procedimiento rápido, las distintas prórrogas solicitadas por la demandada y la sobrecarga del juzgado provocan que la resolución se demore varios meses.
Consejos prácticos para afrontar un juicio verbal
- Preparar bien la documentación: Contratos, recibos, burofaxes y cualquier prueba escrita son esenciales. Cuanto más clara sea la prueba, más ágil será el procedimiento.
- Evitar errores de notificación: Muchas demandas se retrasan por no poder localizar al demandado. Asegúrate de tener la dirección actualizada o utiliza medios fehacientes de comunicación.
- Consultar con un abogado: Aunque en juicios de hasta 2.000 euros no es obligatorio contar con abogado y procurador, es altamente recomendable para evitar nulidades y formular correctamente las pretensiones.
- Paciencia con los plazos: Aunque legalmente debería ser rápido, en la práctica puede tardar varios meses debido a la acumulación de asuntos en los juzgados.
En definitiva, el juicio verbal es un recurso legal útil para resolver conflictos relacionados con arrendamientos de forma más directa, pero cuya agilidad depende cada vez más del contexto social en el que por circunstancias sociales y decisiones políticas se han aprobado leyes, implementado procedimientos administrativos que dificultan o entorpecen una rápida solución de estos procedimientos.
Sinónimos
Proceso verbal.
